¿Generación de cristal o falta de liderazgo?

Los líderes tienen oportunidad única de construirse según sus propias habilidades para gestionar mejor y retener talentos.
Twitter
LinkedIn
Facebook
WhatsApp
Telegram
Email

En el mundo laboral actual, las habilidades técnicas y las habilidades sociales/emocionales son cada vez más importantes. ¿Cómo afecta esto a los jóvenes que trabajan para alguien que no ha desarrollado estas habilidades y no los ayuda a crecer?

Si bien las hard skills son fundamentales para llevar a cabo tareas específicas, actualmente son las soft skills las que están adquiriendo cada vez más importancia en el ámbito profesional. Estas habilidades, como la empatía, la comunicación efectiva y la capacidad de establecer relaciones sólidas, se destacan, sobre todo, en los puestos de liderazgo. En un mundo laboral en constante evolución, comprender y valorar las soft skills es crucial para el éxito de los profesionales, ya que nos permiten construir relaciones sólidas y crear un entorno laboral más colaborativo y empático. ¡Desarrollar estas habilidades te abrirá múltiples oportunidades en tu carrera!

En el contexto actual, el mercado laboral es cada vez más competitivo y complejo. Los equipos de trabajo son cada vez más multiculturales e intergeneracionales, lo que requiere de líderes capaces de comprender y gestionar las diferentes perspectivas de sus colaboradores. Hoy en día, vemos como jóvenes entre 24 y 30 años, que representan una gran parte de la fuerza laboral, suelen abandonar los trabajos si no encuentran un líder con las soft skills necesarias para responder ante sus necesidades personales y profesionales”, explicó Beatriz Arias, fundadora y directora de CoEducation Consulting

En este sentido, los especialistas comparten cuáles son algunas de las habilidades blandas fundamentales para los líderes actuales. 

  1. Comunicación asertiva: la capacidad de expresarse claramente y de integrar activamente la escucha del otro es fundamental para construir relaciones sólidas en un equipo.
  2. Gestión de las emociones: comprender y validar las emociones y perspectivas de los miembros del equipo fomenta la confianza y la cooperación.
  3. Resolución de conflictos: saber manejar desacuerdos y encontrar soluciones constructivas es esencial para mantener un equipo cohesionado.
  4. Liderazgo colaborativo: fomentar la colaboración y el trabajo en equipo en lugar de imponer autoridad unilateralmente.

Estas habilidades son vitales para liderar equipos, y los líderes ahora encuentran una oportunidad única de construirse según sus propias habilidades para gestionar mejor y estar más a gusto con ellas mismas.

Habilidades blandas para liderar una empresa

La diferencia entre los distintos liderazgos y las soft skills que requiere cada uno radica en la magnitud y la complejidad de las responsabilidades. Un líder empresarial debe lidiar con desafíos estratégicos, financieros y globales que requieren una visión más amplia y una toma de decisiones a largo plazo. Además tiene que promover en su equipo que mantengan la energía y el foco hasta el final de sus objetivos. Por lo tanto, entre las habilidades tradicionalmente conocidas como blandas se van a incluir algunas que pasan a esta categoría: la visión estratégica, la gestión del cambio y la capacidad de influir en múltiples partes interesadas”, agregó Arias. 

Habilidades digitales y acceso, una relación ineludible
  1. Tomar perspectiva y capacidad de mirar de lejos: los líderes empresariales deben tener una visión clara de hacia dónde quieren llevar a su empresa, por lo que es necesario que lejos del ajetreado mundo laboral diario puedan hacer una pausa y mirar desde arriba todo lo que sucede en su organización para tener una perspectiva completa del panorama. 
  2. Ejecutar decisiones y tomar riesgos: tener la capacidad de llevar adelante decisiones difíciles de manera rápida y eficaz y a su vez asumir riesgos y responder ante ellos. 
  3. Ser artesano del futuro: es importante que los líderes puedan desarrollar estrategias que permitan a su empresa alcanzar sus objetivos, con la capacidad de mirar, diseñar y adaptarse al escenario futuro. 
  4. Capacidad de leer el aire: se trata de sentir lo que está pasando alrededor, ver la realidad de los sucesos y trabajar en base a eso. 
  5. Resiliencia asertiva: consiste en la capacidad de reinventarse y volver al juego, no se trata de ser resiliente porque sí, sino de tener un plan a ejecutar. 

Los líderes empresariales contemporáneos enfrentan una serie de desafíos globales que van desde la sostenibilidad ambiental hasta la diversidad cultural y la revolución tecnológica, aspectos que deben ser integrados con los nuevos retos que requiere llevar adelante un equipo. Para abordar estos desafíos y guiar sus empresas al éxito, deben poseer una combinación única de soft skills:

En el mundo actual, las habilidades blandas han adquirido una gran importancia para los líderes, siendo un factor determinante tanto en la gestión de equipos como en la dirección de empresas, organizaciones y sistemas. Estas habilidades, que incluyen la comunicación asertiva, la gestión emocional, la visión estratégica y la capacidad de adaptación, son fundamentales para establecer una conexión sólida entre el rendimiento individual y el éxito corporativo. En un entorno empresarial caracterizado por la diversidad, la innovación constante y los desafíos globales, los líderes que poseen estas habilidades están mejor preparados para crear equipos altamente productivos y motivados. Además, tendrán una ventaja competitiva al tomar decisiones estratégicas informadas y enfrentar los retos cambiantes del panorama empresarial contemporáneo.

Twitter
LinkedIn
Facebook
WhatsApp
Telegram
Email

Notas relacionadas