Hoy me llegó un correo de un importante Banco privado extranjero que opera en la Argentina. En ese correo, enviado a su base de contactos y clientes, lo siguiente:
“Nos vamos de Instagram por un tiempo. En las últimas semanas, aparecieron muchas cuentas falsas en esta red que intentan engañar a nuestros clientes”
El contexto de aislamiento social, preventivo y obligatorio que viene caracterizando al 2020, vino acompañado de un aumento en el consumo de redes sociales y de canales electrónicos para evitar que la actividad económica se desplome. Este aumento también trajo riesgos. Según datos de la Asociación Argentina de Lucha Contra el Cibercrimen (AALCC), se observa entre el primer semestre de 2019 y primer semestre de 2020 se observó un incremento de casi un 72%.
En este caso, el Banco decidió remarcar la importancia de chequear, al momento de interactuar con cualquier cuenta corporativa, que se trate de una cuenta verificada. Es decir, que tenga ese tilde azul que le otorga legitimidad. Si bien este tipo de estrategias de verificación de las redes ha sido falseada muchas veces utilizando iconos o emojis similares, o bien haciendo un collage, con el sólo hecho de tomarse unos segundos es fácil hacerlo.
Las plataformas sociales están creciendo cada vez mas y sumando recursos y herramientas que favorecen no sólo la interacción sino también la compra-venta de productos. Es por eso que, antes de iniciar o comenzar a utilizarlas es fundamental que generemos confianza en nuestra comunidad, que estemos realmente seguros de que la plataforma es segura para ese tipo de operaciones, que sea transparente. Además, es fundamental conocer cuáles son las prácticas fraudulentas más frecuentes para poder combatirlas.
Siguiendo con los datos de la AALCC, en la actualidad el fraude representa el 16,56% de las consultas recibidas durante la cuarentena pudiendo incrementarse un 12,45% en los casos de phishing utilizando para extraer datos y luego cometer fraude, pronunciándose en los meses de junio, mayo y abril de 2020. En este contexto las metodologías más utilizadas han sido phishing bancario (35%), phishing con tarjeta de crédito (30%), compras en portales no validados (15%), compras a través redes sociales (12%), compras / validaciones de datos telefónicas (8%).
No debemos hacer uso del social listening para detectar o generar interés en nuestra marca, sino también para proteger a nuestros potenciales clientes y a los que ya forman parte de nuestra comunidad.
Una buena planificación, una estrategia robusta y una respuesta rápida puede permitirnos prevenir problemas y evitar que debamos tomar decisiones drásticas como cortar un canal de comunicación con nuestros clientes y nuestra comunidad de un día para el otro.
En Circulaciones acompañamos a nuestros clientes y cuidamos su identidad digital en todos los canales de comunicación. A veces los cuidados no permiten crecer tan rápido como se quiere, pero la mejor manera de crecer es con la confianza y la seguridad que nos brinda y que le brindamos a nuestra comunidad.
Por Lucas Esteban Delgado, Periodista y consultor en comunicaciones en la Agencia y Productora de Medios Circulaciones
