Un código QR interoperable es aquel que puede ser leído por cualquier billetera virtual permitiendo pagar únicamente mediante una transferencia entre cuentas bancarias. De ese modo, resulta imposible pagar con tarjetas de crédito o débito, en caso que los clientes quieran utilizar sus plásticos para abonar. La persona deberá generar un QR en concepto de cobro para los comercios.
Los códigos QR son una herramienta financiera que ayuda a evitar el contacto físico y ayudan a ahorrar tiempo. Sin embargo, aunque se ha avanzado mucho en su adopción por parte de los usuarios, resta mucho por hacer. Hoy, el efectivo sigue siendo la primera opción al momento de pagar por los argentinos, dado que aún hay un 70% de las operaciones de pago que no está digitalizado.
Sin embargo, esta semana, se conocieron detalles sobre la propuesta en el país. Bancos, fintech y el resto de actores que integran el ecosistema de pagos digitales de la Argentina confirmaron que afinan los detalles para ofrecer a partir del próximo 29 de noviembre, la interoperabilidad de los pagos con Código QR, de manera de cumplir con la normativa de Transferencias 3.0 que estableció el Banco Central (BCRA).
De qué se trata la iniciativa QR interoperable
El plan «Transferencias 3.0» propuesto por el Banco Central está orientado a crear un sistema que reemplace el DEBIN (Débito automático) y los PEI (Pagos Electrónicos Inmediatos). Concretamente, se tratará de una plataforma única, con «mejor tecnología», en la que convivirán tarjetas de débito, crédito, pagos con QR y otros sistemas como el pago asociado a un DNI o un celular.
El objetivo será garantizar la inmediatez de las transferencias de pagos de modo que cualquier usuario de una billetera digital o aplicación bancaria -sin importar la empresa que la provea- pueda usar un código QR de reconocimiento para pagar un consumo o servicio en cualquier comercio o empresa del país.
Ya existen acuerdos con las principales empresas y bancos que operan en el mercado como ANK, MODO, Cuanta DNI, BNA+, Yacaré y Rebanking, entre otras, y que actualmente cerca del 25% de los comercios que ofrecen cobrar con su QR pueden recibir pagos de estos proveedores.
Actualmente, la mayor parte de comercios que operan con código QR lo hacen a través de muy pocas empresas -Mercado Pago y Firstdata, fundamentalmente- por lo que habrá «una retribución» en la normativa para las empresas que lograron que el comercio instalara el QR como medio de pago.
En ese sentido, el borrador de la norma establece un arancel del 0,8% por transacción, del cual el 65% iría para la empresa que proveyó el QR, de modo que empresas que hacen el esfuerzo comercial se queden con una parte relevante.
Una de las ventajas de esta forma de pago es que el comercio recibirá el dinero en forma inmediata y sin posibilidad de revertir el cobro, lo que genera incentivos para aplicar este mecanismo de pago.
Antecedentes de la propuesta
La iniciativa del Banco Central llega luego de que la Cámara Argentina de Fintech presentara en julio un documento, que contiene la firma de 50 empresas de todos los tamaños, para desarrollar un mecanismo muy ansiado dentro de todo el ecosistema: el QR interoperable.
Este sistema (QR interoperable) es ampliamente dominado por Mercado Pago, que actualmente cuenta con una red de 700.000 comercios en todo el país. En caso de avanzar con esta iniciativa, el gigante del ecommerce -también firmante del proyecto- deberá amoldarse a las nuevas reglas de juego.
Según detalla el documento, cada parte que se incorpore al sistema deberá suscribir:
-Un acuerdo marco de adhesión, que se celebrará con COELSA y establecerá las condiciones de conexión y los principios para la interoperabilidad.
-Un convenio estandarizado y bilateral con cada uno de los participantes, que fijará reglas comerciales y obligaciones recíprocas, incluyendo pautas para la resolución de conflictos.
En este proyecto, la firma del primer acuerdo será condición necesaria para celebrar los acuerdos bilaterales y participar del sistema. La integración a COELSA deberá efectuarse mediante un banco que garantizará el cumplimiento de las obligaciones asumidas por los participantes que integre.
Los distintos players coinciden en la importancia del desarrollo de la Interoperabilidad QR y en que es una herramienta clave para reducir los costos de los servicios financieros, gracias a su infraestructura de simple uso e implementación, sin gastos en equipos físicos para procesar los pagos.
QR y la necesidad de seguridad
Un estudio llevado a cabo por MobileIron mostró que un 86% de usuarios móviles ha escaneado un código QR en el último año. Sin embargo, el mismo estudio refleja que un 34% de los encuestados no se preocupa por su seguridad al utilizar estos códigos. Por este motivo, Check Point® Software Technologies Ltd. (NASDAQ: CHKP), un proveedor líder especializado en ciberseguridad a nivel mundial, advierte de los ciberriesgos asociados a los códigos QR.
Es importante destacar que los códigos QR se utilizan de forma mayoritaria a través del smartphone, por lo que pueden servir de puerta de acceso a la información que almacena el dispositivo. De hecho, con un código QR, o una aplicación para su lectura en las manos erróneas podría llegar a dar acceso a datos de ubicación, iniciar la descarga de software malicioso en el equipo (troyanos bancarios, malware, etc.) e incluso realizar pagos. De hecho, esta última aplicación se está comenzando a implementar en mayor medida para evitar el uso de dinero físico y como alternativa a las soluciones NFC (Near Field Communications).
En este sentido, desde Check Point señalan que el teléfono móvil es uno de los objetivos prioritarios de los cibercriminales, ya que según el informe Threat Intelligence Report de la compañía, durante la primera mitad del 2020 casi un 8% de los ciberataques en España iban dirigidos contra los smartphone, situándose un 1,5% por encima de la media a nivel mundial.
Asimismo, desde la compañía advierten de la necesidad de aumentar los niveles de seguridad y concienciación ante tecnologías como la de los códigos QR que aparentemente no parecen tener ningún riesgo, pero que pueden comprometer la confidencialidad de nuestros datos. Por ello, es fundamental instalar herramientas de seguridad que protejan los dispositivos.